Dos tipos de final (Vona Groarke)
Estará esperando; ojo en la ventana,
oreja en la puerta, un día antes ella
piensa en..., mañana y tarde,
como dos trenzas de lluvia burdas,
peinadas, a ras del cráneo;
Luego piensa en él
siente todo su sedimento acumularse
en los pulmones, garganta, boca.
Si no fuera por el cuerpecito-
estrella-de-mar en el tercio superior
de su cama azul profundo,
una mano abierta, la otra anudada
en el aliento a leche caliente,
arrancaría la página 100 de
cada una de sus novelas favoritas, lo haría;
Dejaría los colores revoloteando en forma de soga
en el mueble de marmol de la cocina.
Lo dejaría montarla mientras ella no está:
Palabras duras contra nuevos flancos arrancan
a mano toda inocencia.
Pero, ¿Cómo puede ser?
Se pregunta, sin anillo, para desplazar
la tarde un poquito a la derecha.
Así. Naranjas. Ciruelas.
Two Kinds of Ending
She’d be waiting; eye to the window,
ear to the door, a day behind her
she thinks of, morning and afternoon,
as two sullen plaits of rain
clipped, tightly, to her skull;
then thinks of him
feels the silt of him thickening
in her lungs, her throat, her mouth.
If it weren’t for the small body
starfished in the top third
of the deep-blue bed,
one hand open, the other burled
inside hot milk breath,
she’d tear page 100 from his
every favorite novel, she would;
leave the flitters in the shape of a noose
on the marble countertop.
Let him riddle that in her being gone:
words hard against new edges ripped
by a hand all innocence.
But how can it be?
She asks it, ringless, to budge
the evening a small bit to the right.
There now. Oranges. Plums.
Comentarios
Publicar un comentario