Pares

Cerré los ojos en un gemido atemporal. Yo, la definición de movimiento.
En la contracción de los epitelios rogué por constancia y cuando el aire me dejó liviana solté uno a uno los secretos que guardaba Pandora.
Ahí están el individual con la aguja puesta en el último punto de la flor española, los cinco diarios y el cuaderno que sería un recuento de la vida de Joaquín.
Y está el guamillo del medio del lote. Creando bosques como quien cuenta un secreto en una célula urbana, bajo tierra, casi un secreto. Llamando ejércitos de avispas con gritos silentes, siendo visitado por una variedad de mensajeros migrantes en las noches y madrugadas. Amarrándome al suelo y enseñándome formas alternas de amar y resistir al tiempo.
Hoy camino poco. Me voy endureciendo y las raíces y las paredes, y las flores y las hojas caídas me dan la elasticidad de las piedras grises que pisamos alguna vez en el río.
Cualquier rayo de sol se recibe con amor, abro mis brazos con intención de iguana mientras el viento me mueve, poco, el pelo. 

Comentarios

Entradas populares